viernes, 8 de junio de 2012

Necesidades,

Tengo tanta vida como ganas de besarte. Y hay aquí tanta luz que me molesta, quiero la noche para verte entre las sombras. Tu olor pegado a mi cuerpo no se desprende y me pide que vuelvas. Todo lo que hago o pienso se rebela contra mí porque no estás. Si tuviera un solo instante me descolgaría ventana abajo y correría a tu encuentro. Pero he de estar en esta prisión de alta seguridad todavía unos días más, y cada día que pasa me reconcome el pensamiento más y más qué estarás haciendo.  No sabes cómo me gustaría llegar y descubrirte entre mis sábanas, o en la bañera lleno de espuma mirándome con tus ojos de gato herido. Uno de tus besos en mis lágrimas y todo el mal se iría tan deprisa como vino. Uno de tus besos en mis labios y sentiría al temor disiparse.  Una de tus risas en mi oído, traspasándome el corazón y pinchándome las costillas.
Sólo eso necesito.

No hay comentarios: